lunes, 9 de febrero de 2009

de A-venidas...


La marca en el rostro permaneció todo el sábado y las primeras horas del domingo, ahora, como si quisiera el objeto recordarme cómo había llegado a marcarse en mi cara (¿por qué?, ¿dónde? y ¿cómo?…) (¿fue tu cuerpo contra el mío?, ¿el mío solo?, ¿la mano simplemente?, ¿todo?)... como si de verdad fuera importante, como si necesitara de la huella física para que fuera real… empiezo un efemérides personal para ese viernes que permanece… mental…

todos los 3 de junio debieran incluir una leyenda que diga: si usted es de esas personas que, en días como hoy, duerme fuera de casa y se despoja del pasado y el futuro, de la monotonía, del descaro y la vergüenza, del arrepentimiento antiguo y de la ropa, debe despojarse ante todo y en primera instancia de la culpa: dejarla tirada en la primer alcantarilla de Neza, el Viaducto o Churubusco...

no vaya a ser que en una de esas...

2 comentarios:

PROSÓDICA dijo...

Ja! en esta sociedad de mier... cómo cuesta despojarse de la culpa, hay un acusador en cada ente.

Mano, de veras me llega que hayas puesto lo del frijol jajaja y me gustó mucho lo que escribis, no sé cuál era tu trabe hombre, si está bueno en serio y el look del blog, ni hablar, me encantó. Ya te linquié, así que me tendrás aquí seguidito para la frijolada.

Abrazotes

frijolitou dijo...

qué gusto que hayas pasado... que hayas encontrado el acertijo del frijol! jaja qué gusto sobre todo haberte conocido! ya ves, yo experta en letras no soy, pero me gusta vomitar palabritas en el teclado de vez en vez...

le abrazo!